Lo que no es el Perdón

Perdonar en ciertas situaciones de mi vida me es muy difícil si no es que imposible, aunque tenga motivos para querer hacerlo simplemente se me atora en la garganta las palabras “te perdono”. Por eso conocer lo que no es el Perdón tal vez me ayude a percibirlo de manera diferente y tal vez me prepare para comenzar a recorrer este proceso en el que busco sanar las heridas que tengo.

En mi historia he sufrido ofensas y he querido avanzar para dejar atrás situaciones que me lastiman, consumen, o limitan mi potencial, hay días en los que ante el menor conflicto o diferencia cambio mi estado de ánimo y tiendo a encerrarme.  

El dejar atrás esas situaciones sin poder tener una “reparación del daño” creo que es lo que me mantiene atado al pasado o a esas situaciones, como si el soltarlas hiciera que la persona que me ofendió pudiera seguir su camino sin tener que “pagar” o reparar lo que se rompió en mí y es está liberación la que me hace aferrarme más fuerte a esas situaciones para esperar el momento en el que pueda volver a equilibrar la balanza, en el que pueda cobrar por los daños recibidos.

Creo que parte del problema viene de lo que entiendo por Perdón que es “liberar” o “condonar”, como si “aquí no hubiera pasado nada” aunque también creo que el Perdón es importante 

Importancia del Perdón

Uno de los elementos que buscamos en nuestra vida es la felicidad, está la perdemos de vista por vivir situaciones que nos lastiman, duelen, limitan y desconocemos cómo procesarlas. Aquí es donde entra El Perdón y su importancia en nuestra vida.

Aprender a procesar las diferentes situaciones que vivimos nos ayudará a encontrar la felicidad pues estaremos enfocados en avanzar hacia lo que estamos buscando en lugar de mirar hacia el pasado.

Es en este proceso donde encontramos dificultades pues tenemos un entendimiento, en ocasiones errado de lo que es el perdón por eso veamos lo que no es El Perdón

Lo que no es el perdón

  • No es olvidar. Olvidar nos expone a volver a cometer errores en nuestra vida pues al olvidar lo que pasó olvidaríamos también la lección en esa experiencia de vida y nos exponemos entonces a volver a cometer los mismos errores.
  • No significa negar lo que pasó. “Aquí no pasó nada” es una frase que suele aparecer al enfrentarnos a situaciones que nos lastiman, pretende hacer parecer que no hubiera ofensa que perdonar y esto nos limita de aprender sobre lo que vivimos para que podamos hacer ajustes en comportamientos o conductas que nos lastiman. Pareciera que estamos aceptado comportamientos que nos lastiman y que esta bien que se den generando así heridas más profundas y difíciles de sanar.
  • No es una obligación. Tienes que Perdonar…” es otra frase que se dice en situaciones que nos lastimaron, en ocasiones cuando está relacionado con familiares o personas allegadas, Perdonar por obligación o forzarlo previene que sea un Perdón verdadero.
  • No significa sentirse como antes de la ofensa. Las diferentes situaciones que vivimos nos marcan y enseñan a ver e interpretar el mundo que nos rodea independientemente de cómo reaccionemos, es gracias a este aprendizaje que avanzamos en nuestra vida, después de una vivencia lo aprendido nos cambia y ya no seremos los mismos de antes, al igual que por el simple hecho de vivir envejecemos y nunca seremos los mismos.
  • No significa renunciar a nuestros derechos. El principio de acción y consecuencia se utiliza en las diferentes vivencias mientras que es posible Perdonar el hecho o al ofensor este tendrá que afrontar las consecuencias de sus acciones. Un ejemplo claro de este elemento es el Perdón que otorgó el Papa Juan Pablo II a su agresor el cual aún perdonado tuvo que afrontar las consecuencias legales de agredir a un Jefe de Estado.
  • No significa disculpar al ofensor. El disculpar está asociado a “condonar”, “olvidar”, “liberar” al ofensor de su comportamiento y este simple hecho se nos atora, Esta asociado a las acciones del ofensor, requiere su reconocimiento y enfrentar las consecuencias de estas.
  • No es una demostración de superioridad moral. Perdonar por qué “soy mejor que tú” es en ocasiones un comportamiento que se tiene, sin embargo el Perdón surgido de este comportamiento carecerá de sus propiedades curativas retardando la sanación de las heridas generadas.
  • No consiste en traspasarle la responsabilidad a Dios. “Que te perdone Dios” otra frase común en situaciones difíciles de procesar por nosotros, sin embargo somos nosotros quienes requerimos recorrer el camino del Perdón pues fuimos nosotros quienes sufrimos la herida y por ende somos nosotros quienes requerimos sanar.
  • Requiere más que un acto de voluntad. Algunas de las vivencias que experimentamos serán difíciles de procesar pues hay “algo” que esta fuera de lugar e impide que fluya el Perdón.

Conocer lo que no es el Perdón nos ayudará a tener una percepción diferente de el y permitirá que entremos en el proceso de Perdonar con mayor flexibilidad.